QUE DEBILITA A LA FAMILIA HOY
LEER GENESIS 27:1-46
Introducción: La pandemia y sus efectos en la familia
Una pandemia sin cura llegó de manera inesperada y obligó a todos los países a tomar medidas fuertes como el aislamiento forzoso y el distanciamiento físico. Se acabaron las salidas fuera de casa y quedaron en el olvido los gestos y los abrazos.
Para todo el mundo, niños, jóvenes y adultos, ha sido una experiencia bastante compleja. Se ha hecho necesario apoyar a las familias en esta convivencia altamente intensa. Por lo general, el encierro tiende a ser difícil porque se dan entre elementos negativos como el miedo y la ansiedad. Algunas familias tienen mucha organización en sus hogares e implementan rutinas con horarios estables. Esto es de gran ayuda. Invito a todas las familias a tener un modelo de rutina acorde con sus necesidades para crear un sentido de normalidad y productividad.
Algunos padres también han podido gozar de compartir más tiempo de calidad con sus hijos. Así, han logrado conocerlos mejor y han establecido vínculos mas fuertes. Como vemos, para algunos ha sido una experiencia enriquecedora a pesar de que es una situación larga y llena de incertidumbre. A propósito, la incertidumbre es la que produce miedo, temor y angustia
Mas sin embargo antes de la cuarentena ya existían situaciones que destruian o debilitaban a las familias, HOY ABORDAREMOS ALGUNAS DE ELLAS.
Evita estas 5 situaciones que destruyen familias
¿Sientes que tu familia se destruye? Si no sabes cómo actuar frente eso, aquí encontrarás algunas ideas para evitar que tu familia se destruya.
Las familias se ven afectadas por diferentes situaciones que pueden destruirlas cada día. ¿Cuántas veces has pensado que tu familia se está autodestruyendo? Me refiero a problemas de desintegración real: la falta de comunicación, violencia, infidelidades, adicciones, depresiones. Pese a que la vida también está llena de momentos maravillosos, la mayoría de las familias pasamos por momentos difíciles. Cuando no sabemos cómo actuar ante a ellos, corremos el riesgo de enfrentarnos a la autodestrucción familiar.
Es importante aprender a identificar y actuar ante las situaciones adversas que se presentan en nuestra vida. En lo personal, considero que estas siete, que a continuación comparto contigo, son las más destructivas. Por ello, es importante saber enfrentarlas:
1. Infidelidad
Uno de los temores de toda familia, padres y madres, es la infidelidad. Muchas mujeres nos casamos ilusionadas y enamoradas, deseando que el amor dure para siempre. Muchos hombres creen que llegó la felicidad eterna. A veces no sucede así. Si tu pareja actúa diferente, su economía está estancada, has descubierto mentiras, se preocupa en exceso por su estado físico y en tu corazón albergas la sospecha, debes enfrentar el problema.
No supongas nada, aclara las cosas antes de actuar. La solución es la sinceridad y la confianza; hablen y dejen claros sus sentimientos. Abran sus corazones y procuren comprender el dolor y las consecuencias destructivas que la infidelidad puede traer a su familia. Busquen ayuda profesional, eviten la autodestrucción como camino fácil. Actúen de inmediato. La iglesia de Dios tiene a hombres y mujeres preparado y equipados para ayudar en estas situaciones. Pueden acudir a sus pastores
2. Enfermedad
Si estás pasando por una situación donde tu estado de salud afecta gravemente a tu familia, reúneles y platiquen sobre las soluciones y consecuencias de esta enfermedad. Te aconsejo que busques ayuda médica especializada y recuerda que casi todas las enfermedades pueden curarse o enfrentarse con éxito cuando son tratadas a tiempo. No permitas que un problema de salud te aleje de quienes amas y destruya tu familia. Pero recuerde que la iglesia de Dios tiene poder para orar por las diversas enfermedades y Dios cumpliendo sus promesas da la sanidad
3. Violencia familiar
Una cosa es discutir, disentir y hasta vociferar cuando platicas en el seno familiar, pero si estás pasando por violencia física y/o emocional constante, debes buscar soluciones o tu familia terminará destruida y muy lastimada.
Primero, acepta el problema. No hay peor ciego, que quien no acepta que no ve. De ser necesario asiste a terapia en busca de ayuda profesional para enfrentar la situación. Si quien genera la violencia eres tú, sé humilde y pide perdón. Busca ayuda especializada para evitar esa conducta destructiva. Como pastores siempre estamos dispuesto a mediar en estas situaciones, pero cada uno debe hacer su parte. Deben comprometerse a realizar cambios de actitudes en sus vidas, Dios les dara la victoria
4. El dinero
La escasez de dinero o el exceso de bienes, pueden llegar a destruir una familia. Actúa para evitar estas situaciones. Ya sea por escasez o exceso, la solución siempre será la humildad, el amor y la sana comunicación. Todo lo que hagas, hazlo en compañía de tu familia, sean honestos en el manejo del dinero y sacrifiquen en favor de su familia, para lograr objetivos y metas en común.
¿Lo tuyo es mío, lo mío es mío, o cómo le hacemos?
5. Adicciones
Si en tu familia experimentan el dolor causado por las adicciones, no lo guarden entre ustedes, como un secreto. Háblenlo en familia y actúen conforme a las soluciones que juzguen pertinentes para evitar que se agrave la situación, llegando a consecuencias dolorosas o fatales. Este es un tema delicado, pero es importante aceptar cuando existe una adicción en nuestra familia. Hoy en día hay centros de rehabilitación que ayudan a muchas familias a evitar su destrucción por causa de la adicción.
Amar al adicto, adicción aparte, Dios ama al pecador no al pecado
La aceptacion del problema primer paso para cambiar
Lo más importante es aceptar que tu familia está experimentando una situación autodestructiva. Pero no por ello te frustres, ni decaigas, al contrario: actúa y busca soluciones en familia, ante cualquier problema que se presente. La fe y la comunicación son factores elementales para evitar la destrucción familiar. Verás que muchas cosas buenas vendrán a tu vida si aprendes a enfrentar los momentos adversos y transformarlos en motivos para fortalecer la unidad familiar.
PROBLEMAS FAMILIARES MÁS COMUNES
Las dificultades más importantes a las que se suelen enfrentar las familias son las siguientes:
Falta de comunicación: dificultad para la expresión de emociones o necesidades.
Conductas inadecuadas o impulsivas: peleas, consumo de sustancias, etc
Dificultades en la adaptación al cambio: llegada de un nuevo miembro de la familia, cambios de domicilio, pérdidas de trabajo, perdidas de un ser querido.
Patologías de algún miembro de la familia: desarrollo de enfermedades inhabilitantes o crónicas, tanto a nivel físico como mental.
Excesiva rigidez o permisividad: Gestión de normas muy estrictas o permisivas, querer tener razón siempre coartando libertades de los otros miembros de la familia.
Gestión de las tareas cotidianas: asunción de responsabilidades en las tareas de la casa, gestión de la economía familiar
Conflictos externos de los hijos: problemas con los amigos, problemas en el colegio.
Toma de decisiones: permitir decisiones o denegarlas a algún miembro de la familia, no saber ceder.
Faltas de respeto: gritos, insultos, agresiones físicas...