jueves, 7 de enero de 2016

PREPARANDONOS PARA LA CONQUISTA DEL 2016
El deseo del Señor es que siempre podamos vivir en victoria sobre el pecado, las circunstancias, el enemigo y aún sobre las pruebas.
Es fácil ceder ante la presión de las dificultades y darnos por vencidos, pero en este estudio veremos la importancia de mantenernos firmes en las pruebas y que hacer para mantenernos firmes en las dificultades y contra los ataques del enemigo.

Leer 2 Crónicas 31:21 – 32:23 ( EL REY EZEQUIAS)

2Ch 31:21  En todo cuanto emprendió en el servicio de la casa de Dios, de acuerdo con la ley y los mandamientos, buscó a su Dios, lo hizo de todo corazón, y fue prosperado. 

 2Ch 32:1  Después de estas cosas y de esta fidelidad, vino Senaquerib rey de los asirios e invadió a Judá, y acampó contra las ciudades fortificadas, con la intención de conquistarlas. 
2Ch 32:2  Viendo, pues, Ezequías la venida de Senaquerib, y su intención de combatir a Jerusalén,
2Ch 32:3  tuvo consejo con sus príncipes y con sus hombres valientes, para cegar las fuentes de agua que estaban fuera de la ciudad; y ellos le apoyaron. 
2Ch 32:4  Entonces se reunió mucho pueblo, y cegaron todas las fuentes, y el arroyo que corría a través del territorio, diciendo: ¿Por qué han de hallar los reyes de Asiria muchas aguas cuando vengan?
2Ch 32:5  Después con ánimo resuelto edificó Ezequías todos los muros caídos, e hizo alzar las torres, y otro muro por fuera; fortificó además a Milo en la ciudad de David, y también hizo muchas espadas y escudos.
2Ch 32:6  Y puso capitanes de guerra sobre el pueblo, y los hizo reunir en la plaza de la puerta de la ciudad, y habló al corazón de ellos, diciendo:
2Ch 32:7  Esforzaos y animaos; no temáis, ni tengáis miedo del rey de Asiria, ni de toda la multitud que con él viene; porque más hay con nosotros que con él.
2Ch 32:8  Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo tuvo confianza en las palabras de Ezequías rey de Judá.
2Ch 32:9  Después de esto, Senaquerib rey de los asirios, mientras sitiaba a Laquis con todas sus fuerzas, envió sus siervos a Jerusalén para decir a Ezequías rey de Judá, y a todos los de Judá que estaban en Jerusalén:
2Ch 32:10  Así ha dicho Senaquerib rey de los asirios: ¿En quién confiáis vosotros, al resistir el sitio en Jerusalén?
2Ch 32:11  ¿No os engaña Ezequías para entregaros a muerte, a hambre y a sed, al decir: Jehová nuestro Dios nos librará de la mano del rey de Asiria?
2Ch 32:12  ¿No es Ezequías el mismo que ha quitado sus lugares altos y sus altares, y ha dicho a Judá y a Jerusalén: Delante de este solo altar adoraréis, y sobre él quemaréis incienso?
2Ch 32:13  ¿No habéis sabido lo que yo y mis padres hemos hecho a todos los pueblos de la tierra? ¿Pudieron los dioses de las naciones de esas tierras librar su tierra de mi mano?
2Ch 32:14  ¿Qué dios hubo de entre todos los dioses de aquellas naciones que destruyeron mis padres, que pudiese salvar a su pueblo de mis manos? ¿Cómo podrá vuestro Dios libraros de mi mano?
2Ch 32:15  Ahora, pues, no os engañe Ezequías, ni os persuada de ese modo, ni le creáis; que si ningún dios de todas aquellas naciones y reinos pudo librar a su pueblo de mis manos, y de las manos de mis padres, ¿cuánto menos vuestro Dios os podrá librar de mi mano?
2Ch 32:16  Y otras cosas más hablaron sus siervos contra Jehová Dios, y contra su siervo Ezequías.
2Ch 32:17  Además de esto escribió cartas en que blasfemaba contra Jehová el Dios de Israel, y hablaba contra él, diciendo: Como los dioses de las naciones de los países no pudieron librar a su pueblo de mis manos, tampoco el Dios de Ezequías librará al suyo de mis manos.
2Ch 32:18  Y clamaron a gran voz en judaico al pueblo de Jerusalén que estaba sobre los muros, para espantarles y atemorizarles, a fin de poder tomar la ciudad.
2Ch 32:19  Y hablaron contra el Dios de Jerusalén, como contra los dioses de los pueblos de la tierra, que son obra de manos de hombres.

Jehová libra a Ezequías
2Ch 32:20  Mas el rey Ezequías y el profeta Isaías hijo de Amoz oraron por esto, y clamaron al cielo.
2Ch 32:21  Y Jehová envió un ángel, el cual destruyó a todo valiente y esforzado, y a los jefes y capitanes en el campamento del rey de Asiria. Este se volvió, por tanto, avergonzado a su tierra; y entrando en el templo de su dios, allí lo mataron a espada sus propios hijos.
2Ch 32:22  Así salvó Jehová a Ezequías y a los moradores de Jerusalén de las manos de Senaquerib rey de Asiria, y de las manos de todos; y les dio reposo por todos lados.
2Ch 32:23  Y muchos trajeron a Jerusalén ofrenda a Jehová, y ricos presentes a Ezequías rey de Judá; y fue muy engrandecido delante de todas las naciones después de esto.

Cómo debemos prepararnos para las dificultades?

  1. DEBEMOS BUSCAR AL SEÑOR DE TODO CORAZÓN
“En todo cuanto emprendió en el servicio de la casa de Dios, de acuerdo con la ley y los mandamientos, buscó a su Dios, lo hizo de todo corazón, y fue prosperado” (2 Cro 31:21)
La única forma de mantenernos firmes de las batallas es buscando al Señor y hacerlo de todo corazón.  El es quien nos hace estar firmes, El es quien nos da la fuerza para vivir y quien levanta nuestra cabeza delante de nuestros enemigos.  Es imposible vivir una vida victoriosa separados del Señor.  Dios quiere que vengamos a El cada día con fidelidad, para recibir de Su mano la victoria.  “Bendito sea Jehová, mi roca, quien adiestra mis manos para la batalla, y mis dedos para la guerra”  Salmo 144:1

  1. ESTAR CONSIENTES DE QUE LA BATALLA ESPIRITUAL ES REAL
“Después de estas cosas y de esta fidelidad, vino Senaquerib rey de los asirios e invadió a Judá, y acampó contra las ciudades fortificadas, con la intención de conquistarlas.  Viendo, pues, Exequias la venida de Senaquerib, y su intención de combatir a Jerusalén” (2 Cro 32:1-2)
No debemos negar que hay una batalla espiritual contra nosotros, más bien debemos reconocer de donde vienen muchos de los ataques contra nosotros, y seguir la estrategia que Dios nos da para pelear contra nuestro enemigo.

“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros”  Santiago 4:7


  1. BUSCAR EL CONSEJO DE LA PALABRA DE DIOS
“Tuvo consejo con sus príncipes y con sus hombres valientes” (2 Cro 32:3)
Debemos buscar primeramente el consejo que Dios nos da en Su Palabra y también de aquellas personas que con la sabiduría de Dios pueden ayudarnos a discernir y enfrentar las situaciones.

  1. QUITAR TODAS LAS COSAS DE LAS CUALES EL ENEMIGO PUEDE APROVECHARSE
“Entonces se reunió mucho pueblo y cegaron todas las fuentes, y el arroyo que corría a través del territorio, diciendo:  porque han de hallar los reyes de Asiria muchas aguas cuando vengan”  (2 Cro 32:4)
No hay que darle facilidades al enemigo, hay que arreglar las cosas que puede usar en nuestra contra Efesios 4:27 “ni deis lugar al diablo.”  Tito 2:6-8 “Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes;  presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad, palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence, y no tenga nada malo que decir de vosotros. “

5.       RESTAURAR LAS COSAS QUE ESTAN CAIDAS
“Después con ánimo resuelto, edificó Exequias todos los muros caídos”.  (2 Cro 32:5)
Debemos restaurar todas las cosas que están caídas en nuestras vidas, buscar la Palabra de Dios, la oración, relaciones rotas, etc.  Nuestro Dios es un Dios de restauración.



  1. REFORZAR LA PROTECCIÓN ESPIRITUAL
“y exequias hizo alzar las torres, y otro muro por fuera; fortificó además a Milo en la ciudad de David, y también hizo muchas espadas y escudos”  (2 Cro 32:5)
Encuentros diarios con la Palabra de Dios nos hacen fuertes
Exequias reforzó y puso doble muro sobre la ciudad, así debemos proteger, levantar muros y dobles muros alrededor de nuestra vida.  La oración nunca esta de más.  Exequias hizo espadas y escudos.  La espada representa la Palabra de Dios, por lo cual debemos ser fuertes en ella y el escudo representa la Fe que debemos fortalecer en el Señor.

  1. DEBEMOS ESFORZARNOS Y ANIMARNOS
Hay que levantar el ánimo con palabras de verdad.
Esforzaos y animaos; no temáis, ni tengáis miedo del rey de Asiria, ni de toda la multitud que con él viene porque más hay con nosotros que con él.  Con él está el brazo de carne, más con nosotros está Jehová nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas.
Y el pueblo tuvo confianza en las palabras de Exequias rey de Judá” (2 Cro 32:7-8)
“Porque vendrá el enemigo como río, mas el Espíritu de Jehová levantará bandera contra él” Isaías 59:19


  1. NO ESCUCHAR LA VOZ DEL ENEMIGO SINO LA DE DIOS
(2 Cro 32:9-19)
Una de las estrategias del diablo para derrotarnos es: que pongamos atención a lo que él nos esta hablando y no a lo que el Señor nos dice.  Eso es una trampa en la que muchos caen, y al escuchar al enemigo siempre caeremos en temor y confusión.  Por eso, es de suma importancia que aprendamos a escuchar la voz de nuestro Dios, que siempre nos da seguridad y paz, debemos hacernos fuertes en Su Palabra y no poner atención a las mentiras de Satanás.

  1. GOZARNOS EN SU SALVACIÓN
Nuestro Dios es un Dios Salvador y cuando confiamos en El nunca nos defrauda, y mueve su poderoso brazo para obrar a nuestro favor.  El Señor usa diferentes métodos para ayudarnos, a veces envía ángeles, en otras ocasiones usa personas, pero siempre nos da respuesta cuando clamamos a El.
“Mas el rey Exequias y el profeta Isaías hijo de Amoz oraron por esto, y clamaron al cielo.  Y Jehová envió un ángel, el cual destruyó a todo valiente y esforzado, y a los jefes y capitanes en el campamento del rey de Asiria.  Este se volvió, por tanto, avergonzado a su tierra; y entrando en el templo de su dios, allí lo mataron a espada sus propios hijos.  Así salvó Jehová a Exequias y a los moradores de Jerusalén de las manos de Senaquerib rey de Asiria, y de las manos de todos; y les dio reposo por todos lados”  (2 Cro 32:20-22)

Conclusión: Este es un tiempo para levantarnos y conquistar lo que Dios nos ha entregado, esfuérzate y levántate en el nombre del Señor, porque tu Dios está contigo para ayudarte y pelear tus batallas.